Cuando éramos pequeños, mis hermanos y yo veraneábamos con nuestros padres y tíos en Barcelona. De aquella bella provincia, sólo guardo bonitos y entrañables recuerdos. Por ello, en cuanto me hice adulto y pude, no lo dudé y me compré una casita en Barcelona, un lugar para mí encantado, para poder ir de vacaciones o algún que otro fin de semana con mi familia y/o amigos.
Ver más