Estancias de lujo en Barcelona

La excitación de explorar las maravillas de una ciudad desconocida, la exigencia de los horarios de visita, las caminatas exhaustivas en busca de la mejor fotografía, pasar el día a la intemperie, el deleite del paladar con joyas ignotas de la gastronomía, las comidas improvisadas… Viajar es una de las experiencias más placenteras que existen; abre la mente, cautiva a los sentidos y reconforta el corazón. Pero también posee una serie de incómodas contrapartidas que, al final de la jornada, se acumulan y pesan sobre la espalda del visitante. Por esta razón, encontrar un refugio que suponga a partes iguales un merecido descanso y la continuación de la magia de esta experiencia única es un detalle capaz de convertir un viaje para el recuerdo en un viaje para la eternidad.

Mercer Hotel es a la vez el exponente perfecto de los hoteles de lujo de Barcelona y, además, un monumento en sí mismo. Asentado en el corazón de la Ciudad Condal, en las sabrosas callejuelas del carismático Barrio Gótico barcelonés, Mercer Hotel Barcelona es un enclave esculpido en el tiempo. Las investigaciones arqueológicas efectuadas sobre el edificio en el que revelan la convivencia en su estructura de vestigios arquitectónicos que abarcan desde el siglo I después de Cristo hasta el pujante siglo XIX. Mercer Hotel Barcelona es Barcelona. Parte suya son los bastiones de las murallas de la romana Barcino. Su paso de roda, todavía visible después de siglos, conecta desde el exterior por medio del acceso urbano de la Calle dels Lledó, a través de la galería gótica que la antecede. La tradición histórica se conjuga con la modernidad. Idéntico valor artístico entraña la remodelación estética del conjunto emprendida por el prestigioso arquitecto Rafael Moneo, premio Pritzker y premio Príncipe de Asturias de las Artes.

No obstante, formar parte de los hoteles 5 estrellas de Barcelona requiere no quedarse solo en el aspecto físico. Lo importante se encuentra en el interior. Los más exclusivos logros y caprichos de la civilización contemporánea tienen lugar para la satisfacción de los viajeros más curtidos y de los sibaritas amantes de los placeres mundanos.

Las habitaciones de Mercer Hotel están diseñadas para transportar al cliente a un paraíso de confort, relajación, intimidad y lujo. Estancias como la Gran Deluxe combinan unas proporciones amplísimas –alcanza los 50 metros cuadrados de superficie- con el exquisito gusto de su diseño, la nobleza de su mobiliario y la funcionalidad de su innovador dispositivo electrónico, dotado de los principales aparatos tecnológicos. O la Gran Suite, conmemorada a los visitantes más refinados gracias a su estructura de 150 metros cuadrados dividida en dos espacios interconectados, con idénticas prestaciones tecnológicas de gama alta.

A juego con la exclusividad de las instalaciones del hotel, el restaurante y la coctelería invitan a descubrir y dar rienda suelta a un mundo de pasiones insospechadas, recogidas en una carta capaz de sugestionar la imaginación más versada y minuciosa.

Acorde a su prestigio, la cadena Mercer cuenta con otros establecimientos y  hoteles de lujo en Barcelona. Mención especial merece el Mercer Bória BCN, localizado en el barrio homónimo, uno de los entornos urbanos más multiculturales y activos de la capital catalana. Mercer Bória BCN acerca la suntuosidad característica de su marca a enclaves de notoriedad turística como la iglesita de Santa María del Mar, el Museo Picasso o el Palau Reial, así como a los principales circuitos comerciales de Barcelona.

Idéntico boato reviste a los lofts repartidos por la metrópolis catalana. Suponen el alojamiento idóneo para aquellos viajeros que deseen una mayor independencia en su visita a Barcelona y constan, según el caso, de una, dos, tres o cuatro estancias equipadas con la mente puesta hasta en el último detalle de confort.

Y por si fuera poco, con el objeto de hacer extensible el goce de la experiencia a toda la provincia, la cadena Mercer Hoteles dispone de alojamientos de lujo en otras localidades turísticas de Barcelona como Vilafranca del Penedès, una de las cabezas vitivinícolas del país, dotada de una arquitectura urbana erigida en referente del estilo modernista. En el núcleo mismo de la villa, Mercer Hotel Casa Torner i Güell ofrece dieciséis soberbias estancias que en nada tienen que envidiar a las del establecimiento capitalino.