Cuando vives en una gran ciudad es fácil que, entre los horarios de trabajo, el estar yendo de aquí para allá todo el tiempo, el ruido de las calles, o el tráfico no nos quede mucho espacio para el relax.
No es difícil que, viviendo en una gran ciudad como Barcelona, podamos padecer estrés y ansiedad, debido a la sobre estimulación a la que estamos expuestos.
Sin embargo, Barcelona también reúne una serie de interesantes lugares para desconectar de ese ritmo frenético si sabemos buscar los rincones adecuados.
Tus momentos para el silencio en una gran ciudad
Así es, todos necesitamos unos espacios para nosotros, para conectar con nuestras emociones y dejar que el silencio nos haga llegar las respuestas.
Estaba pasando una época especialmente estresante, lo relacionaba con el trabajo, pero me daba la sensación de que debía de ser otra cosa que aún no había identificado.
Compartía piso con otras 5 personas así que el único espacio para mí era mi habitación, pero muchas veces me llegaban los ruidos del salón y del resto de la casa. Así que pensé en buscar los rincones más tranquilos de Barcelona para tratar de desconectar y encontrar esa calma perdida.
Sabía que, aun siendo una gran ciudad, Barcelona tenía que tener sus parajes para la relajación y la calma sabiéndolos buscar.
No tardé en hacerme una lista con algunos de mis lugares favoritos.
Entre ellos, el Patio de Letras, en el edificio antiguo de la Universitat de Barcelona está este oasis lleno de plantes con su propio estanque donde, tanto estudiantes, como a quienes ya se les pasó la época puedan refugiarse del tráfico y ruido de la ciudad.
Otro de mis lugares favoritos para encontrar un poco de calma es el Ateneu Barcelonés, un estupendo refugio del centro, aunque de más difícil acceso, porque en este caso hay que ser socio o matricularse en la Escuela de Escritura. En mi caso, al tener amigos en la Escuela, he podido encontrar la forma de entrar, pero es una pena que sea de tan difícil acceso, quizás por ello gane tanto como espacio para el relax.
Los espacios en la ciudad se agradecen porque puedes encontrar esa calma deseada sin salir de la ciudad, pero alejándote un poco en Mont Juïc, no solo tendremos un espacio natural, sino también un rincón ideal para encontrar esa tan deseada calma.
Fue en la Plaza Sant Felip Neri, una de las plazas más tranquilas de la ciudad, con su iglesia, y hasta una fuente en el medio, los efectos del agua son realmente relajantes.
En uno de esos momentos de plena calma y relax empecé a sentir que el malestar venía más de que había desatendido mucho mi bienestar, ni me había dado cuenta de que tenía una inflamación importante en las encías y dolores lumbares.
Ahora, más relajada podía empezar a actuar con más eficacia. De hecho, en cuanto lo hablé con mi hermana, que vive en Madrid, me invitó a visitarla y me dijo que me acompañaría ella misma a peridonciamadrid, una de las únicas clínicas especializadas en periodoncia, con las técnicas más modernas y grandes profesionales con mucha experiencia.
Era la clínica a la que iba siempre mi hermana que también padecía de problemas con las encías, me pareció buena idea porque era una excusa para ir a visitarla y contarle mis descubrimientos de una Barcelona más relajada y retarla a ver si ella también conocía los lugares más tranquilos en su ciudad.
Nos retamos a ver cuál de las dos conseguía hacer la Ruta más Relajante posible en una gran ciudad. ¿Sería la Ruta de Madrid o la de Barcelona?
La respuesta a esta pregunta todavía es un misterio, pero lo que es bien cierto es que el relax existe hasta en las grandes ciudades, para quienes la quieren encontrar.