Barcelona puede presumir de tener uno de los mejores ocios nocturnos de España. Y afortunadamente no solo en tiempo estival, también durante el resto del año. Estuve invitado por un amigo durante los pasados Carnavales, y al verdad es que pienso repetir. Ya me había anunciado que es una ciudad con marcha, así que fuera preparado. Incluso bromeando me comentaba que entrara en la página web de comercialapra.com, y que comprara preservativos a granel, porque intuía que íbamos a triunfar. Un exagerado. La verdad es que ligar no ligamos nada, pero disfrutar del ocio nocturno de la ciudad lo hicimos a tope.
Salimos dos noches. Y ya se sabe que estas cosas se hacen con premeditación y nocturnidad. Se empieza con unas cañitas inocentes y acabas más perdido que una cabra en un garaje. Ya os digo que el primer día, por eso de llegar cansados del viaje, habíamos pensado salir a tomar algo en plan ‘tranqui’. Pero al final hemos acabado desayunando una samosa con sabor a gin tonic delante de la zona del Apolo a las 7 de la mañana. Uno de los sitios más visitados por los turistas. Cuando hablamos con unas turistas italianas, la verdad es que si que recordé el famoso consejo de traer condones a granel, pero luego se me olvidó.
Me gusta mucho Barcelona por ser una ciudad muy Cosmopolitan. El segundo día fuimos a discotecas del puerto, en la famosa zona de los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, y la verdad es que está muy bien. Nos dijeron entrar sin problemas, bueno previo pago de la entrada, en todos los lugares. Una vez dentro el trato fue muy agradable. Se nota que es una ciudad adaptada a los nuevos tiempos, y en los sitios había gente de todas las nacionalidades. La verdad es que yo no noté la famosa mala gestión que está llevando a cabo la nueva alcadesa Ada Colau. Al final de todo, las ciudades, los pueblos o los países no les hacen buenos ni malos los políticos, sino su gente. Y tengo que reconoce que los catalanes conmigo fueron muy gentiles.
Variado pero no es barato
Lo que está claro es que aunque la oferta es muy variada, el ambiente más animado se puede encontrar, específicamente, en ciertos barrios y zonas de la ciudad, con discotecas, pubs, coctelerías y bares para todo tipo de gustos. Lo que no suele variar tanto son los precios, que no son precisamente baratos. Aun así, existen opciones para salir de fiesta por Barcelona y no arruinarse en el intento, aunque para eso lo mejor es que alguien conozca a algún camarero y pueda hacerte precio especial. En mi caso, mi colega tenía a un compañero de carrera trabajando en un bar de la zona del Gótico y las primeras copas cayeron allí. Además no sabía que esta ciudad tenía tan buen ambiente carnavalero, con la proclamación de la reina Beluga.
En esta ocasión nos he hablado solo del ocio nocturno, pero está claro que Barcelona es mucho más. La próxima vez que viaje ya he quedado con mi colega que conoceremos la ciudad de día, para así enterarnos mejor de todo lo que pasa. En definitiva, la ciudad condal, llamada así por su relación con el Condado de Barcelona, tiene mucho que ver cuando cae el sol.